Por ahora he domiciliado la factura de mi móvil en su cuenta. Pero una Diosa tan perfecta como yo merece algo más que un mero gasto mensual, así que este perdedor me ha regalado un móvil de última generación. Buen pagafantas... muy bueno.
Sin embargo, lo más llamativo es que este esclavo ejemplar no pide NADA a cambio. El único placer que necesita es tributarme y hacerme feliz. No suplica verme, ni ser humillado… ni ninguna de las habituales peticiones de los perros rastreros.
Aprende, putita, y pon tu cuenta bancaria a mis pies.
es Usted perfecta, Diosa. sólo somos míseros gusanos ante un ser superior como Usted,gracias por existir Diosa,a sus pies
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